En la fundación Canal se puede visitar ésta exposición hasta el día 3 de enero. Resulta un tanto extraña mas que nada por las circunstacias en las que la visité, fuí el domingo hasta la fundación Canal pensando que me iba a encontrar con una exposición contemporánea sobre las tribus urbanas en la juventud, desde los años 60 hasta la actualidad, y por el contrario me vi metida en esta exposición.
Lo cierto es que no es una exposición que me haya gustado en exceso, pero me parece una buena oportunidad para comentarla, ya que no todo lo que ves te tiene que gustar, y menos a la primera.
La exposición se divide en varias partes, que fueron los logros que consiguió en su época este autor:
La primera parte se centra en los fotomontajes, collages simples compuestos con diferentes fotos recortadas y pegadas a su vez.
Va pasando por varias innovaciones que aportó este artista a la fotografía hasta entonces conocida. Como el cambio de encuadre, perspectivas y demás.
También, como fotógrafo de su época, estaba fascinado por toda la revolución en cuanto a máquinas y maneras de trabajar que resultaban ser de lo más puntero y revolucionario. También como buen soviético, se acerca al mundo del deporte, a las masas y los desfiles existentes en su entorno.
En conclusión, ha sido una exposición que no me ha gustado especialmente, es cierto que crea las bases de lo que iba a llegar en el mundo del arte, me recuerda mucho al movimiento dadaista pero dejando a un lado la anarquía y despreocupación de este último.
Por lo tanto, pienso que este artista no es más que uno más de sus coetáneos, y que se han hecho cosas más interesantes que las de este artista, ya que intenta hacer algo original pero parece que se queda en el camino.
1 comentario:
bien, pero tienes que ver las recomendadas de la semana
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